¡País de Mierda!

Ayer pisé territorio argentino por primera vez en 9 meses y en 10 minutos volví a España horrorizado.

No, no estoy tan loco. Fui al Consulado General argentino en Madrid a revalidar mi pasaporte recientemente vencido. Al ver el sitio web del consulado todo parece lindo, pero cuando llegué a las 10:30 a la calle Ortega y Gasset 62 del conchetísimo barrio de Salamanca me encontré con las sorpresas.

En principio esperaba encontrar un edificio, aunque sea modesto, con un cartel que indicase cual era el consulado. Encontré la placa de bronce en la pared, pero el edificio no era sino un edificio de viviendas donde el consulado es el departamento 2º Izquierda.

Un poco decepcionado subo por las escaleras, llego y veo un cartel que indica que solo se atenderá por orden de número. En el reducido vestíbulo hay unas 30 personas. Entonces me pregunto donde estarán los números, y veo un aparato para entregar números pero que no tiene rollo de números. Ingenuamente le pregunto a una persona que estaba ahí cómo sacaba el número, veo que las miradas se avalanzan sobre mi, ¿qué he hecho?. Me explica que dan 30 números por día, y que hay que venir por lo menos a eso de las 4 de la madrugada para poder conseguir un número. Sigo hablando con otras personas por ahí y me lo reconfirman, hay gente desde la medianoche, y hay que pasar toda la noche invernal, y todo el día siguiente ahí para hacer cualquier trámite.

Flor de calentura enterarme que para revalidar mi pasaporte me voy a tener que comer 10 horas de trámite, de las cuales 5 van a ser en la calle de Madrid en una fría noche de invierno. Y no solo eso, por un simple sello en el pasaporte he de pagar 25€ (93 pesos) y ese pasaporte caducará en el preciso instante en el que ponga mi pie sobre el suelo de Ezeiza. Por lo que tendré que ir corriendo a sacar un pasaporte nuevo y pagar 35€ por el (130 pesos). En total 60€ por la jodita (223 pesos).

No estaría tan caliente si no fuese que además de comerme el garrón tengo que pagarles 25€, y que se supone que en España, donde hay muuuchos argentinos debiera haber un consulado al menos decente y no una verdadera pocilga.

En unos días, si sigo vivo luego de comerme una noche con gripe en la calle, escribiré más sobre esta experiencia de mierda, de un país de idem.

Crónica de una noche en la calle en esta página web.

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30 de Abril de 2005, han pasado más de 6 meses desde que escribí este post. Hoy acabo de releerlo y me he sorprendido de lo duro que he sido en ese comentario. Es que estaba muy caliente en esos días. Sigo manteniendo los comentarios que hice en cuanto a la mala atención que ¿daba? el consulado argentino en Madrid. Pero a lo mejor fui demasiado duro con los calificativos. En fin, no dije mucho más que lo que miles de argentinos dicen día a día, lo que pasa es que yo soy culpable de no estar allí.